Fauna
En la Serra de Tramuntana se han descrito más de 4200 especies de animales, plantas y hongos.
La mayoría de estas especies se encuentran en Escorca, si bien no existe un catálogo específico del municipio. Las condiciones geológicas, climáticas y biológicas de este lugar y el buen estado de conservación de sus hábitats favorecen la elevada diversidad faunística.
Centenares de especies de invertebrados viven en Escorca, de los que estacamos especies como el escarabajo de sangre (Timarcha balearica), una especie endémica de Mallorca, o la mariposa de seda china Antheraea pernyi introducida en Mallorca en el siglo XIX para su explotación comercial, aunque fallida. Hoy en día aún podemos encontrar ejemplares atraídos por la luz en los densos encinares del municipio, especialmente en los meses de Abril y Mayo.
Son pocas las especies de anfibios y reptiles presentes en el municipio. De los primeros destaca el ferreret (Alytes muletensis), la única especie de ertebrado no volador que sobrevivió a la llegada del hombre. Desde hace ya tres décadas se destinan grandes esfuerzos para su conservación, ya que por su condición de especie endémica es uno de los tesoros de la naturaleza más apreciados por la cultura local. De manera más frecuente podremos observar en pequeñas balsas de agua el sapo verde (Bufonetes balearicus), una especie propia de Córcega y Baleares, que se reproduce en charcas temporales que se suelen secar en los meses estivales.
De los reptiles destacamos la salamanquesa común (Tarentola mauritanica), como uno de los vertebrados más abundantes de la isla. Sus densidades son tan elevadas que es difícil no percatarse de su presencia en los meses cálidos, mientras se dan baños de sol sobre las rocas calcáreas. Mención aparte requiere la culebra viperina (Natrix maura) una especie introducida en época romana y que es la principal causante de la rarefacción y extinción de gran parte de tas poblaciones de ferreret que había antes de su llegada. Actualmente la especie está sujeta a un control poblacional con la finalidad de mitigar su efecto sobre A. muletensis.
Se estima que actualmente conviven en el municipio de Escorca alrededor de 140 especies de aves, de las cuales, apenas un 30% se reproduce en él. Muchas especies solo son detectadas durante los pasos migratorios. La observación de aves es sin duda la actividad que más amantes de la naturaleza puede atraer hacia Escorca. El buitre negro (Aegypius monachus) puede que sea el ave más emblemática y conocida, visitante habitual de los cielos de Escorca. Dos de las Zonas de Especial Protección para las Aves (ZEPA) en el ámbito del término municipal fueron declaradas por ser
lugar de nidificación de esta especie: Costa Brava de Mallorca y Sa Costera.
También podemos encontrar otras rapaces como el águila pescadora (Pandion haliaetus), el halcón de Eleonor (Falco eleonorae) y el peregrino (Falco peregrinus) o el águila calzada (Aquila pennata). Por nombrar algunas otras especies de interés podemos citar al roquero solitario (Monticola solitarius), que suele animar con sus cantos los paseos durante la primavera y el verano, la curruca balear (Syivia balearica), la Única especie endémica de las Islas Baleares o el papamoscas gris (Muscicapa striata balearica), de menor tamaño que la subespecie nominal y con el pecho más blanco.
Las cabras son junto con los rebaños de ovejas los únicos herbívoros que pastan en estas tierras. El número de individuos de estas especies, sobretodo de las cabras, genera problemas de conservación en especies vegetales endémicas o de distribución reducida.
Los mamiferos camivoros son tal vez uno de los grupos más esquivos. Especies como la gineta (Genetta genetta) o la marta (Martes martes), pueden ser detectados ocasionalmente, durante las horas en que el sol se esconde, aunque a menudo nos podemos encontrar con sus rastros en los senderos, sobretodo en el caso de la marta.
Otras especies de mamiferos camivoros como el mapache (Procyon lotor) y el coatí (Nasua nasua) han llegado a Mallorca como consecuencia del comercio de animales de compañía. Se trata de dos especies que generan grandes perjuicios ambientales por lo que su gestión y control poblacional es una necesidad por parte de la administración.
Si veis un ejemplar de esta especie no dudéis en contactar con el Ayuntamiento de Escorca para que pueda facilitar la información a la administración competente.
Finalmente uno de los grupos de mamíferos más destacables por su importante papel ecológico es el de los quirópteros o murciélagos. En las Islas Baleares se conocen alrededor de dos decenas de especies, algunas de las cuales utilizan refugios en árboles viejos de las masas forestales, mientras que otras lo hacen en cavidades y cuevas bajo tierra. La diversidad de murciélagos presentes en el municipio no está del todo estudiada, pero la presencia de hábitats idóneos y de especies de invertebrados hacen de él un lugar perfecto para su observación.
