La orografía accidentada y la red de caminos convierten Escorca en un lugar ideal para la práctica de la bicicleta de montaña. No obstante, esta actividad aún no está regulada y no existen itinerarios señalizados y específicamente adaptados a este uso.

El Pla Especial de la Ruta de Pedra en Sec prevé los usos admitidos en cada uno de los tramos de cada etapa, definidos en función de su fragilidad. Asi, los tramos donde el uso de la bicicleta será admisible serán los que tienen un grado de fragilidad baja.

En el caso de la etapa 6, el uso de la bicicleta está restringido a los tramos núm. 3, 4 y 5 que corresponden al Cami de Can Sales, de Sóller y al Cami Vell de Fornalutx, respectivamente.

En el caso de la etapa 7, sólo se admite en el tramo 4, desde las inmediaciones de la Font Coberta hasta Son Amer. Y finalmente, en la etapa 8, en el tramo 4 desde las inmediaciones de Can Rondalla hasta Pollença.

En la práctica de esta actividad se deben extremar las precauciones frente a la presencia de otros usuarios en la vía, de manera que se eviten siempre riesgos tanto a los propios ciclistas como a los demás usuarios.